JUAN – Día 2
Juan 1
Los primeros discípulos
35 Al siguiente día estaba otra vez Juan, y con él dos de sus discípulos.
36 Y mirando a Jesús que andaba por allí, dijo: «¡Este es el Cordero de Dios!»
37 Los dos discípulos lo oyeron hablar y siguieron a Jesús.
38 Volviéndose Jesús y viendo que lo seguían, les dijo: –¿Qué buscáis? Ellos le dijeron: –Rabí –que significa «Maestro»–, ¿dónde vives?
39 Les dijo: –Venid y ved. Fueron y vieron dónde vivía, y se quedaron aquel día con él, porque era como la hora décima.
40 Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que habían oído a Juan y habían seguido a Jesús.
41 Aquel encontró primero a su hermano Simón, y le dijo: –Hemos encontrado al Mesías –que significa «Cristo»–.
42 Y lo trajo a Jesús. Mirándolo Jesús, dijo: –Tú eres Simón hijo de Jonás; tú serás llamado Cefas –es decir, Pedro–.
Jesús llama a Felipe y a Natanael
43 Al siguiente día, Jesús quiso ir a Galilea; encontró a Felipe y le dijo: –Sígueme.
44 Felipe era de Betsaida, la ciudad de Andrés y Pedro.
45 Felipe encontró a Natanael y le dijo: –Hemos encontrado a aquel de quien escribieron Moisés, en la Ley, y también los Profetas: a Jesús hijo de José, de Nazaret.
46 Natanael le dijo: –¿De Nazaret puede salir algo bueno? Respondió Felipe: –Ven y ve.
47 Cuando Jesús vio a Natanael que se le acercaba, dijo de él: –¡Aquí está un verdadero israelita en quien no hay engaño!
48 Le dijo Natanael: –¿De dónde me conoces? Jesús le respondió: –Antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.
49 Natanael exclamó: –¡Rabí, tú eres el Hijo de Dios! ¡Tú eres el Rey de Israel!
50 Le contestó Jesús: –¿Crees porque te dije: «Te vi debajo de la higuera»? Cosas mayores que estas verás.
51 Y agregó: –De cierto, de cierto os digo: Desde ahora veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subiendo y bajando sobre el Hijo del hombre.