JESÚS ES EL REGALO DE VIDA ETERNA

Juan 3:16

Es posible que en estas Navidades hayas recibido muchos regalos. Tal vez hayan sido pocos… Alguno no te habrá gustado. Alguno habrá sido realmente especial. Pero por significativo que haya sido, se queda en insignificante si lo comparamos con el regalo que nos hizo Dios al enviarnos a Su Hijo. El regalo de Jesús nos trajo otro regalo más: la vida eterna.

Este es un regalo que realmente no merecemos. Todos cometemos errores, nos equivocamos, pecamos y tenemos actitudes incorrectas. Y pensar en ello a veces nos carga. Pero no podemos dejar que nuestros pensamientos de culpabilidad nos dominen y nos llenen de frustración. El enemigo está muy interesado en que nos quedemos centrados en todo aquello que nos aparta de Dios y anclados a esos pensamientos.

Jesús vino para desmentir ese engaño: “…El Hijo de Dios fue enviado precisamente para destruir las obras del diablo.” (1 Juan 3:8 NVI). Jesús vino para traer esperanza y verdad. Él es la única verdad que debe llenar nuestras mentes y corazones. Al tomar esta decisión: creer la verdad y rechazar las mentiras de Satanás, recibimos la “dádiva” de Dios, la salvación. ¿Cuál es la verdad que llena tu vida? Deja que Jesús sea tu verdad.

En esta Navidad, Jesús quiere entregarte el regalo más especial. Solo tienes que hacer una cosa: «si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo.» (Romanos 10:9 NVI). 

• Si no lo has hecho aún, no pierdas el tiempo y eleva una oración a Jesús diciéndole que crees en Él. 

• Si ya lo has hecho, comparte estas buenas noticias con todos los que te rodean.

Débora Tasqué · Dénia