DIA 6

LAS NECESIDADES DE LOS DEMÁS PRIMERO.

CONECTA

Toma un par de minutos para decirle «buenos días» a Dios a tu manera y cuéntale cómo te sientes hoy. Pídele que te hable por medio de este devocional.

• SUMÉRGETE EN LA PALABRA

Es normal y natural sentirse atraído a aquellos a quienes conoces y con quienes te sientes cómodo. Entramos a una cafetería e inmediatamente buscamos a quien conocemos y con quién nos gustaría sentarnos. Sin embargo, en el pasaje de la Escritura de hoy, Jesús desafía nuestra tendencia de solo amar a quienes nos aman.

Lee las palabras de Jesús en el Sermón del Monte en Mateo 5:43-47.

¿Qué mandamiento les da Jesús a sus oyentes en el versículo 44?

¿Quiénes son los enemigos en tu vida hoy? ¿Quiénes son las personas en tu vida que no te importan debido a quienes son o por cómo te tratan?

¡Ora ahora mismo por esas personas que nombraste! Detente y toma un momento para levantarlos en oración. Pídele a Dios que obre en sus vidas y que les dé una gran relación con Él. Pídele a Dios que los bendiga hoy.

¿Fue muy difícil hacer esto? ¿Cómo te sentiste cuando estabas orando por ellos?

¿Por qué Jesús nos pide amar y orar por nuestros enemigos según el versículo 45?

Incluso Dios provoca que le ocurran cosas buenas a personas malvadas en el mundo. Él aún hace que el sol brille sobre ellos y les envía lluvias refrescantes. Es bueno para nosotros ser como nuestro Padre: ser amorosos y amables con nuestros enemigos. Según los versículos 46 y 47, ¿cuáles son las dos acciones que Jesús critica de sus oyentes?

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Si solo nos importaran nuestros amigos y si solo les decimos «hola» a ellos, no somos mejores que el resto de este mundo. Incluso los no cristianos hacen eso. No obstante, tenemos a Cristo en nosotros y Jesús nos llama a un estándar más alto: a amar y a preocuparnos de todos, no solo de nuestros amigos (quienes nos aman). Somos llamados a preocuparnos de todos tanto como nos preocupamos por nuestros amigos. Somos llamados a decir «¡Hola! ¿Cómo estás?» a quienes no conocemos y de quienes no somos amigos.

¿Qué impide que saludes a personas que no conoces o que son conocidos que no conoces tan bien?

Es fácil caer en la rutina de solo amar a nuestros buenos amigos. ¿Qué puedes hacer para amar a quienes no son tus amigos tanto como amas a tus amigos?

• RESPONDE Y ESCUCHA

Toma un momento para contarle tus pensamientos sobre este pasaje a Dios. Conversa con Él sobre tus sentimientos. Responde a lo que Él ha dicho por medio de su Palabra. Luego toma un momento para escucharlo. Siéntate en silencio por un par de minutos y ten la certeza de que Él está ahí contigo, tan real como el aire que respiras

• DESAFÍO DIARIO

Conoce a alguien nuevo hoy. Cuando vayas a la escuela y almuerces, no solo «saludes a tus hermanos», sino que siéntate con alguien que no conoces, incluso si son completamente diferentes a ti. Preocúpate hoy del barista o de la mesera tanto como lo haces por tus amigos. Pregúntales cómo están hoy (y realmente anhela escuchar su respuesta).

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